Has pensado, has decidido. Pero nunca has llegado a hacerlo.
Puede que casi haya pasado, que lo hayas notado. Pero nunca has llegado a hacerlo.
¿Qué te impide que cuando te mueres de ganas por besarla y la tengas justo entrente, no lo hagas?
Arrepientete luego, pero mientras la besas serás feliz. Y quién sabe.
Quizás sea el primer beso de algo maravilloso. Algo que te abra las puertas del cielo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario